¿Quieres ser más feliz? Te cuento cómo

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Hablemos de las expectativas.

Si en mi CV tuviera la oportunidad de poner habilidades reales y no esas que “tienes” que poner para que la persona de Recursos Humanos pase tu CV pondría “Amplia experiencia en poner expectativas”.

Ni siquiera puedo contar cuántas veces no he puesto expectativas en los demás, en las situaciones y sobre todo en mí, y la verdad me ha limitado muchísimo a ser feliz.

¿Te acuerdas de algún momento que fue súper inesperado y te encantó? De lo que sea… Incluso ese un restaurante que no conocías o una salida que no esperabas, las típicas que salen de la nada pero curiosamente salen perfectas. He estado analizando mucho y creo que el verdadero encanto de lo inesperado es la falta de expectativas que se depositan en ello, y por eso es tan mágico, sencillo y real.

¿Cuál es el punto de poner expectativas?

En mi experiencia, poner expectativas significa pensar que las cosas se dan de una sola manera, como lo dice la palabra, “esperar” que todo se ajuste a la forma en la que mi cabeza lo está visualizando, pero qué crees…

En la vida hay muchos factores que se salen de tu control y pensar de esa manera te condena a vivir una vida llena de límites y decepciones.

Sin embargo, es importante tener claro que las expectativas tienen una razón de ser. Leyendo sobre el tema, aprendí que las expectativas “te preparan para el futuro y para hacer alguna acción”, porque las generamos con base en nuestras experiencias y eso está increíble, porque es tu misma sabiduría diciendo por dónde puedes ir… Peeeeero, el tema es que muchas veces nuestra cabeza tiende a hacer predicciones poco realistas y lo único que pasa es que eso que esperabas no pasa.

No importa si pasa algo mejor o peor, el punto es que tu expectativa no se cumple.

Pero... ¿Superar tus expectativas no es algo bueno?

Tal vez algunos podrían pensar “oye, pero ese evento o persona superó mis expectativas” y sí, temporalmente está muy bien, pero ¿Cuántas cosas has dejado de hacer porque tus expectativas son muy bajas? Es decir, independientemente de que en algunas ocasiones se rebasen tus expectativas, me parece que es súper importante reconocer cuando estemos autosaboteando una situación por el mismo hecho de poner expectativas.

Y lo que es peor… ¿Cuántas decepciones te has llevado porque no se cumplieron tus expectativas sin valorar y agradecer lo que sí pasó?

¡Libérate de las expectativas!

Esa es mi invitación para este día, semana y vida. Hazte consciente cada vez que te encuentres poniendo una expectativa y cuestiona para qué lo estás haciendo, cuál sería el verdadero beneficio de cumplirla, qué pasará si no se cumple, por qué no te permites fluir por pensar que solo hay una manera de que pasen las cosas. Abre tu mente y permítete navegar en nuevas oportunidades y nuevas opciones.

Comienza a vivir una vida más flexible, suelta la creencia de querer mantener todo bajo control, la vida no es así y con ella debemos aprender a vivir.

Y tú, ¿Cuántas expectativas tienes sobre tu vida?