Te perdono

Hablemos de eso que todavía no te perdonas

Cuántas veces ese momento vuelve a ti y sientes que pudiste haber hecho algo mejor, que te dejaste llevar por las emociones y no supiste ser más asertiva, más madura, más inteligente, simplemente mejor.

Y piensas en todas las palabras que pudiste haber dicho y que en ese momento no se te ocurrieron o no te dio tiempo decir. Cualquier cosa parece ser mejor que lo que hiciste o lo que dijiste.

Y quieres volver el tiempo, porque aunque da miedo, sientes que ahora sí podrías hacer las cosas diferentes.

O quieres tener otra oportunidad para decir lo que te faltó, para hacer lo que te faltó para pedir perdón.

Pero ¿Tu cuándo te vas a perdonar?

Juzgarse y no perdonarte a ti misma es una carga que pesa, que cargas en silencio y que te limita a muchas oportunidades por solo pensar que estuviste mal.

No se trata de conformismo, arrogancia o evasión. Se trata de reconocer que en ese momento hiciste lo mejor que pudiste con las herramientas que tenías, con la madurez que tenías y el nivel de consciencia que tenías.

Tal vez no tomaste la mejor decisión, pero hoy que lo sabes, reconócete desde el perdón y agradece que ahora eres consciente de ello.

Piensa que si no hubiera sido de esa manera, probablemente no hubieras alcanzado esa sabiduría.